Cuatro carriles más, ¿menos congestión?

Ampliación de la autopista interestatal I-405 en Los Ángeles, la mayor obra de OHLA en Estados Unidos

Fotos: OCTA

El 1 de diciembre ha entrado en servicio la ampliación de un tramo de 25 kilómetros de la autopista interestatal I-401 en el condado de Orange (California), una de los corredores más congestionados de Estados Unidos. La actuación ha comprendido la ampliación de la sección de la autopista de 10 a 14 carriles generando cuatro nuevos 405 Express Lanes, carriles gratuitos para vehículos de alta ocupación (HOV) y de peaje para el resto, con los que el promotor espera reducir los niveles de congestión. Este millonario macroproyecto, ejecutado durante seis años, es una de las mayores ampliaciones de autopista realizadas en Estados Unidos y la mayor obra en la historia de la constructora española OHLA en el país.

El marco

La autopista interestatal I-405, conocida como San Diego Freeway, es uno de los principales corredores que atraviesan de norte a sur el Gran Los Ángeles, segunda área metropolitana más poblada de Estados Unidos (12,8 millones de habitantes en 2022). En el tramo comprendido entre la autopista I-5 (la gran arteria que recorre la costa pacífica de California de norte a sur) y Long Beach, la I-405 es la autopista con mayor volumen de tráfico del país, soportando un tráfico de entre 257.000 y 370.000 vehículos/día según el segmento.

Tanto los carriles regulares como los carriles HOV (High Occupacy Vehicle, aptos para carpool, modalidad gratuita de uso de estos carriles para vehículos con al menos tres ocupantes y de pago para el resto) están congestionados a diario durante las horas punta y también los fines de semana. Según las proyecciones, el tráfico crecerá en esta zona un 30% para el año 2040.

El proyecto

El proyecto I-405 Improvement (Mejora de la I-405) pretende poner fin a esta crítica situación y aliviar la congestión vehicular en esta zona del condado de Orange, contiguo al condado de Los Ángeles.

Su objetivo es ampliar la capacidad de un tramo de 16 millas (25,7 kilómetros) de la I-405 comprendido entre la State Route 73 (SR-73) en Costa Mesa y la autopista I-605 en Seal Beach. Para ello se han realizado dos actuaciones principales: por un lado, la implantación de un carril general adicional por sentido desde Euclid Street hasta la autopista interestatal I-605, y por otro, la construcción en la mediana de un carril HOV por sentido entre la SR-73 y la SR-22. Estos nuevos carriles HOV, en combinación con los dos carriles HOV inaugurados en 2014, generan un total de cuatro carriles 405 Express Lanes, dos por sentido, que pueden ser utilizados de forma gratuita por vehículos con tres ocupantes o más, siendo de pago para el resto. En total, en el tramo hay siete puntos de acceso (entradas y salidas) a los express lanes.

El proyecto también ha incluido otras actuaciones necesarias para dar funcionalidad al nuevo esquema viario del corredor, entre ellas la sustitución de 18 puentes sobre la autopista (demolición y construcción o ampliación), la reconfiguración de dos grandes intercambiadores y 12 enlaces, nuevas rampas de entrada y salida a los nuevos carriles (se han reconstruido 58 rampas), la mejora de carriles auxiliares, la construcción de 190 muros de contención y muros de insonorización, la mejora del sistema de drenaje y la implantación de la infraestructura de peaje dinámico.

Beneficios del proyecto

   El proyecto ha ampliado la sección de la autopista I-405 de 10 a 14 carriles. Ahora está formada por 10 carriles regulares, 5 por cada sentido, y por 4 carriles 405 express lanes, 2 por sentido, en la mayor parte del trazado. Con este aumento de capacidad se espera alcanzar un importante trasvase de vehículos hacia los 405 Express Lanes, ya sea atrayendo a los carpoolers a circular por los mismos de forma gratuita, ya sea proporcionando al resto de usuarios desplazamientos más rápidos a cambio del pago de un peaje.

Según los cálculos oficiales, los 405 express lanes reducirán a la mitad los actuales tiempos de viaje en hora punta en el tramo, que superan los 30 minutos: los conductores ahorrarán una media de 18 minutos en el trayecto completo en dirección norte y un promedio de 13 minutos en el trayecto completo en dirección sur.

El objetivo de las demás mejoras introducidas en la autopista es eliminar los cuellos de botella existentes en la I-405 durante décadas y, en definitiva, contribuir a reducir el elevado nivel de congestión existente en este corredor. La implantación de Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS) en el corredor, además, pretende elevar los niveles de seguridad vial en este tramo y gestionar mejor la congestión.

¿Se reducirá la congestión?

   El gran reto del proyecto es hacer que estos todos estos objetivos se cumplan y que, en definitiva, los niveles de congestión en este tramo se reduzcan. No obstante, la experiencia dice que añadir nuevos carriles a las autopistas para solucionar la congestión vehicular “es como aflojar tu cinturón para curar la obesidad”, como describió en 1955 el urbanista y arquitecto Lewis Mumford para explicar la curiosa paradoja de que el aumento de carriles en una carretera atrae a un mayor número de vehículos y, por tanto, no alivia los atascos, sino que los mantiene e incluso los aumenta a medio plazo. Está por ver si el nuevo dinamismo y la mayor capacidad que introducirán los 405 Express Lanes, junto a una mejor gestión del tráfico en una autopista ampliada, son suficientes para desmentir la máxima de Mumford.

Promotor

El promotor del proyecto ha sido la Autoridad de Transporte del Condado de Orange (OCTA), en colaboración con el Departamento de Transporte de California (Caltrans). Se trata del proyecto de mayor magnitud en la historia de OCTA y uno de los mayores de Estados Unidos en los últimos años.

Contratistas

El contrato de diseño y construcción del proyecto de mejora de la I-405 fue suscrito en enero de 2017 entre OCTA y el consorcio OC 405 Partners, formado por la constructora OHLA USA Corporation, filial de la matriz con sede en Madrid, y la italiana Astaldi Construction (filial de la actual WeBuild). Como subcontratistas exclusivos han intervenido las empresas estadounidenses Myers and Sons Construction, All American Asphalt y MCM Constrruction.

   El equipo de diseño lo ha formado el consorcio Pacific Infrastructure 405 Designers, integrado por Moffat & Nichol, HW Lochner y Arup North America.

Presupuesto y plazos

El proyecto se adjudicó en 2017 en cerca de 1.200 M$ (unos 1.130 M€), aunque el presupuesto final ha superado los 2.100 M$ (1.980 M€). Se trata del contrato más importante de la historia de OHLA en Estados Unidos.

La financiación de las obras ha procedido de una combinación de fondos federales, estatales y locales, en su mayor parte de estos últimos (1.300 M$). La parte de los 405 express lanes del proyecto será financiada mediante los ingresos del peaje asociado a estos carriles.

   La obra se inició en 2018 y se pone en servicio el 1 de diciembre de 2023, cumpliendo con el plazo marcado en el contrato.

Condicionantes

Un proyecto de estas magnitudes ha afrontado numerosos condicionantes que el consorcio constructor ha tenido que resolver durante los los cincos años de obra. Para ello ha trabajado estrechamente con OCTA, Caltrans, varias agencias medioambientales, nueve municipios distribuidos a lo largo del tramo, 200 subcontratistas y más de 300 suministradores de materiales. La coordinación con tan elevado número de stakeholders ha sido clave para el éxito del proyecto.

Un condicionante de primer orden ha sido la necesidad de conjugar durante un lustro las obras con los enormes flujos de tráfico existentes en el tramo. Para reducir las afecciones a los automovilistas, el consorcio ha utilizado avanzadas tecnologías de gestión de tráfico que han incluido el uso de datos históricos junto con la supervisión del tráfico en tiempo real. Esto ha permitido programar las actividades en las horas que suponían un menor impacto para el tráfico. Así, por ejemplo, la demolición de los puentes sobre la autopista y la recogida de los escombros generados se ha realizado en tiempos récord, unas 10 horas, siempre en horario nocturno.  

Los servicios públicos (tuberías de agua, gas, electricidad, fibra óptica…) presentes en el trazado han sido otro importante condicionante de la obra. Según el consorcio, se han reubicado más de un centenar de servicios y se han identificado y protegido otros 400. Además, en el trazado se han encontrado hallazgos imprevistos, como restos y utensilios de nativos americanos, suelos contaminados y agua, factores que han obligado a revisar el proyecto, aunque no han supuesto retrasos significativos de la obra.

Utilización de concreto

   En una obra de esta entidad hay múltiples aspectos a destacar. Uno de ellos es el material empleado para la construcción de la calzada (70 millas) y las rampas (62 millas). Como es habitual en Estados Unidos, el pavimento de las calzadas se ha construido con concreto. La novedad se ha producido en las 68 rampas del proyecto, donde el consorcio decidió emplear también concreto en lugar de asfalto. Con la utilización de una maquinaria especial basada en tecnología 3D, se ha reducido el tiempo de ejecución (la mayor parte de las rampas se han demolido y construido de nuevo en periodos de 32 a 42 días) y se han conseguido superficies extremadamente lisas, diseñadas con una vida útil de 40 años sin un mantenimiento significativo.

En total, en el proyecto se han empleado 288.000 yardas cúbicas de concreto. De ellas, 133.000 del tipo Jointed Plain Concrete Pavement (JPCP) corresponden a las rampas y otras 155.000 del tipo Continously Reinforced Concrete Pavement (CRCP) a las calzadas principales.

Los puentes

Uno de los capítulos más relevantes del proyecto es el de los puentes que sobrevuelan la autopista para dar permeabilidad territorial a la infraestructura, conectando con la red de calles del condado. En total, a lo largo del trazado existen 18 puentes, que presentan una particularidad: la mayoría cruzan el trazado de forma esviada, ya que la autopista, en vez de discurrir de norte a sur, lo hace de noroeste a suroeste. Algunos saltan sobre la autopista en un ángulo de 90 grados, lo que significa que necesitan mayor altura y cimentación profunda, sin que su pendiente sea superior al 6%.

El proyecto ha actuado sobre 18 puentes, que han sido demolidos, reconstruidos y ampliados, y puestos en servicio a medida que se iban finalizando. También se ha construido una pasarela peatonal. La mayor parte de los puentes se han ejecutado en dos etapas, aunque en cuatro de ellos se redujo la ejecución a una sola etapa gracias a la colaboración con los municipios. Estas estructuras se han construido a base de vigas prefabricadas y ejecutadas in situ. El resultado final son puentes de mayor capacidad, con una anchura que duplica a la anterior y que da cabida a cuatro carriles en vez de dos, además de aceras y dos carriles bici. El puente de mayor longitud del proyecto tiene 365 metros.

Sostenibilidad

Todos los materiales procedentes de las viejas calzadas, así como de la demolición de puentes y rampas se ha reciclado y reutilizado como capa base del pavimento CRPC de las nuevas calzadas. En total, 710.000 toneladas de hormigón. Dado que el consorcio disponía de una planta de trituración en el área del proyecto, los materiales desechados no han tenido que ser transportados a una planta exterior, lo que ha reducido el uso de combustibles fósiles para su transporte.

El peaje

El sistema de peaje implantado en la I-405 es un peaje free flow de tipo dinámico. Esto significa que las tarifas varían en función de la hora, el día de la semana, la dirección del viaje y la distancia recorrida, y que son ajustadas de forma regular por el gestor del sistema para garantizar la fluidez del tráfico. De las 19 combinaciones de peaje existentes, la tarifa máxima por recorrer el tramo completo en un carril 405 express lanes durante hora punta es de 9,95 dólares

A lo largo de los 405 express lanes, así como de las entradas y salidas a los mismos, el consorcio ha instalado pórticos de peaje para que los usuarios realicen el pago por su uso. Para ello, deben disponer de transpondedores FasTrak en sus vehículos.  

     Los vehículos con tres o más pasajeros (carpoolers), además de motociclistas y vehículos eléctricos, pueden viajar por los carriles 405 express lanes de forma gratuita. Los vehículos con una o dos personas están obligados a pagar por el uso de estos carriles.